SANTO DOMINGO.- En momentos en que en la República Dominicana se registran numerosos casos de intoxicación por ingesta de alcohol adulterado, medios locales dan a conocer un estudio publicado en Washington, D.C., el cual destaca que en la región de las Américas, entre 2013 y 2015 falleció un promedio de 85 mil personas por consumo de bebidas alcohólicas.

El estudio realizado por la OPS/OMS y publicado hoy en la revista Addiction revela que en las Américas la ingesta per cápita es 25% mayor a la del promedio mundial.

“Este estudio demuestra que el consumo nocivo de bebidas alcohólicas en las Américas debe ser una de las mayores prioridades de salud pública”, afirmó el doctor Anselm Hennis, Director del Departamento de la OPS de Enfermedades no Transmisibles y Salud Mental.

“Está asociado con muertes que se pueden prevenir y con muchos años de vida con discapacidad. Necesitamos medidas de salud pública, políticas y programas eficaces, viables y sostenibles para reducir el consumo de bebidas alcohólicas”, agregó el facultativo.

El análisis de los datos de mortalidad en 30 países de la Región recién publicado — el mayor en su tipo en las Américas — muestra los siguientes resultados clave:

En promedio, 85.032 muertes (1,4%) anuales se atribuyeron exclusivamente al consumo de bebidas alcohólicas. En su mayoría, estas muertes (64,9%) correspondieron a personas menores de 60 años y se debieron principalmente a hepatopatías (63,9%) y a trastornos neuropsiquiátricos (27,4%), como la dependencia del alcohol.

El consumo de bebidas alcohólicas es un factor contribuyente en más de 300,000 muertes (5,5%) al año en la Región de las Américas.

El número de hombres que murieron por consumir bebidas alcohólicas fue mayor al de mujeres, y los hombres representaron 83,1% de las muertes atribuibles exclusivamente a ese consumo.

La OPS exhorta a los países de la Región a frenar el consumo nocivo de bebidas alcohólicas mediante el aumento de los impuestos aplicables e imponer amplias restricciones a la publicidad, la promoción y el patrocinio de estos productos.

Durante la pandemia de COVID-19, las bebidas alcohólicas se han promovido por las redes sociales y su disponibilidad ha aumentado en muchos países debido a la mayor facilidad de acceso a las compras en línea y las entregas a domicilio.

Hay evidencias que indican que las personas con mayor probabilidad de aumentar su consumo de bebidas alcohólicas como resultado estos factores, ya consumían alcohol en exceso antes de la pandemia. Adicionalmente, los puntos de venta de bebidas alcohólicas, como bares y clubes nocturnos, atraen multitudes que no respetan el uso de mascarillas ni practican el distanciamiento social.