Rusia lanzó 122 misiles y docenas de drones contra objetivos ucranianos, indicaron las autoridades el viernes, matando a al menos 24 civiles en lo que la Fuerza Aérea de Ucrania cataloga como la mayor ofensiva aérea en los 22 meses de guerra.
Las fuerzas aéreas ucranianas interceptaron la mayoría de los misiles balísticos y de crucero y drones tipo Shahed durante la noche, explicó el jefe del ejército ucraniano Valerii Zaluzhnyi.
El comandante de la Fuerza Aérea, Mykola Oleshchuk, escribió en su canal oficial de Telegram que fue el “ataque aéreo más masivo” desde la invasión a gran escala de Moscú a finales de febrero de 2022.
Hasta ahora, el mayor ataque era el registrado en noviembre de 2022, cuando Rusia lanzó 96 misiles sobre el país vecino, de acuerdo con el departamento. Con base en sus registros, el peor de este año ocurrió el 9 de marzo, con 81 misiles.
Funcionarios y analistas occidentales habían advertido que, en los últimos meses, Rusia había limitado sus ataques con misiles de crucero en un aparente intento de acumular reservas para llevar a cabo ataques masivos durante el invierno, con los que buscaría quebrar la moral de los ucranianos.
En el frente, los combates están prácticamente paralizados por la llegada del invierno luego que la contraofensiva estival ucraniana no logró avances significativos a lo largo de los alrededor de 1.000 kilómetros (620 millas) de la línea de contacto.
Las autoridades ucranianas han instado a sus aliados occidentales a enviar más defensas antiaéreas para protegerse de andanadas como la del viernes. Sus llamados coinciden con indicios de fatiga bélica, que lastran los esfuerzos para mantener los respaldos.
El primer ministro británico Rishi Sunak dijo que el enorme ataque debería incitar al mundo a tomar más medidas en apoyo a Ucrania.