El presidente Luis Abinader lamentó este domingo la situación catastrófica en algunas localidades del país, tras los últimos aguaceros que se han cobrado la vida de al menos 30 personas.

“Ha sido extremos y sin precedentes la cantidad de lluvias en nuestro país”, expresó el mandatario al encabezar una reunión en Palacio Nacional con los organismos de socorro, en donde anunció, entre varias medidas, la suspensión de la docencia en las escuelas hasta el miércoles.

Aseguró que todo el Gobierno está incorporado en la solución de los problemas generados por el reciente disturbio tropical que, aunque degradado, seguirá generando precipitaciones hasta el lunes.