Desde que Caribbean Cinemas inició sus operaciones en República Dominicana en 1976, siempre hemos mantenido como prioridad ofrecer las mejores instalaciones, servicio, tecnología y programación de películas. Este ha sido el enfoque de la empresa siempre. Una pieza clave ha sido el compromiso constante de la empresa con la industria de cine local.
Nos enorgullese que hemos crecido en la medida en que nuestra industria cinematográfica nacional también lo ha hecho, y en esta última década, la apertura de nuevas salas de cine ha garantizado en todo momento espacio de exhibición para todas las producciones locales, siempre priorizando las mismas. Nuestro apoyo al cine nacional ha sido invariable desde inicios de los noventa. De hecho, de manera individual, las películas que más tiempo se mantienen en cartelera en Caribbean Cinemas son las películas dominicanas, en comparación con películas extranjeras o de Hollywood. Como ha sido siempre el modelo de negocio de esta industria, esa permanencia se extiende en función de su desempeño.
Nos ha sorprendido ver en diferentes medios locales las declaraciones del productor Ángel Muñiz que no responden a la realidad de la empresa ni del sector en sentido general. Varias de sus películas emblemáticas de la década de los 90 llegaron al público dominicano de forma exitosa a través de nuestras salas de cine, así como en las de nuestros competidores. No obstante, la última película de su autoría proyectada en las salas de cine del país fue hace 15 años, específicamente en el año 2008. Desde entonces, nunca hemos recibido su solicitud de estrenar películas suyas en nuestras salas, las cuales, por decisión propia, ha optado por estrenar a través de Youtube y canales de televisión. En el caso de la película “Sola a los 40”, dejamos constancia pública de que, hasta la fecha, no hemos recibido ningún contacto de interés de parte de esta productora y mucho menos solicitud de fecha de estreno para la misma. De hecho, no hemos recibido ninguna solicitud de parte de esta productora desde el año 2008.
Desconocemos los motivos del señor Muñiz para tomar estas decisiones, pero como empresa, hemos demostrado en la práctica a través de los años que nuestras salas de cine están más que abiertas para apoyar la producción cinematográfica dominicana. También hemos manifestado nuestro compromiso con el crecimiento del sector y con la Ley de Cine que ha permitido su desarrollado en la última década. Mantenemos firme nuestra posición de que las películas realizadas bajo estos incentivos deben llegar a la gran pantalla, tomando en cuenta la inversión que realiza el Estado dominicano para que las mismas sean realizadas en un estándar de producción cinematográfica establecido para ese tipo de proyección.
Nuestra política como empresa de apoyar sin excepciones todas las películas producidas localmente en nuestros cines alrededor del país se aprecia mejor en base a números reales y concretos.
Solo desde 2015, nuestra empresa ha exhibido con satisfacción películas extremadamente exitosas que se han mantenido en cartelera por meses. Tal es el caso de Tubérculo, por 16 semanas; el Fantasma de mi Novia, por 12 semanas; Súper Papá, por 12 semanas; Pobres Millonarios, por 10 semanas; I Love Bachata, por 15 semanas; Jugando a Bailar, por 10 semanas; Trabajo Sucio, por 14 semanas; Todas las Mujeres son Iguales, por 15 semanas; y el Equipito, por 12 semanas, solo para dar una muestra.
En los últimos 6 años, hemos distribuido más de 110 películas dominicanas, de las cuales en su gran mayoría han permanecido en cartelera por más de 6 semanas y hasta 14-16 semanas, como es el caso más reciente la película EL BRUJO, que ya acumula 14 semanas en cartelera actualmente, y el documental Caamaño, en tercera semana, aún en exhibición. En todos los casos, sin importar su origen, la permanencia en salas de cine se determina únicamente por la asistencia del público.
Pero nuestra política va más allá. Incluso en el caso de películas de géneros que no son comerciales, nuestras salas ha proyectado películas dramáticas e históricas como La tragedia del Río Verde y Luis (5 semanas); Veneno (12 semanas); Juanita y La isla rota (7 semanas); En tu piel (6 semanas); Papi (5 semanas); Mis 500 locos (9 semanas); Hotel Copelia (7 semanas); Candela (5 semanas); Perejil (8 semanas) y Carajita (5 semanas). Todos estos datos son comprobables a través de la página Web de la Dirección General de Cine (DGCINE).
En adición a la exhibición, en abril del 2021, nuestra empresa de distribución Caribbean Films Distribution firmó un acuerdo con DGCINE para garantizar distribución gratuita a todas las películas ganadoras de FONPROCINE. Bajo este acuerdo, nuestra empresa distribuyó a costo cero para el productor las películas VALS DE SANTO DOMINGO, CANDELA, y LIBORIO. Este programa continúa en vigencia en beneficio de los nuevos directores/productores que necesitan este apoyo para continuar solidificándose.
El cine Fine Arts ha sido la cuna para el cine dominicano de autor, cortometrajes, y documentales. Como parte del apoyo para estrenar películas producidas previo o durante la pandemia, se creó el primero de varios festivales de cine dominicano en el 2021, permitiendo que más de 14 películas locales rodadas en años anteriores se estrenaran. Nuevamente, estas iniciativas son un reflejo de nuestro compromiso de que las películas realizadas bajo incentivos deben ser estranadas en salas de cine, ya que es ese formato y calidad cinematográfica lo que justifica el nivel de inversión realizada en las mismas.
En el 2022, de las 23 películas dominicanas que distribuimos, nos enorgullece que más de 10 han sido películas de autor, las cuales nos han representado en los más prestigiosos festivales internaciones, tales como CARAJITA, BANTU MAMA, PEREJIL, entre otras. Todas estas películas se mantuvieron en cartelera por más de 4 semanas.
Para el 2023, más de 25 películas dominicanas están programadas para ser estrenadas y disfrutadas por el público dominicano, que por décadas ha mostrado su apoyo a nuestro cine nacional.
Nuestro compromiso de la cinematografía dominicano es parte del legado que más nos enorgullese. El cine nacional podrá seguir contando con ese apoyo, a la vez que nuestros salas de cine se mantienen con las puertas abiertas para seguir apoyando a nuestros productores y directores.