Una tormenta invernal en el Atlántico medio, combinada con la pandemia, provocó más cancelaciones o retrasos de vuelos después de las vacaciones de Año Nuevo.

Más de 1,900 vuelos en Estados Unidos y más de 3,300 en todo el mundo estaban suspendidos el lunes por la mañana, según el servicio de seguimiento FlightAware.

Eso sigue a las cancelaciones del domingo de más de 2,600 vuelos en Estados Unidos y más de 4,400 en el mundo. El sábado se cancelaron más de 2,700 vuelos estadounidenses y más de 4,700 en todo el mundo, conforme a un despacho de prensa de la agencia de noticias AP.

Se espera que la tormenta invernal traiga hasta 25 centímetros (10 pulgadas) de nieve para el Distrito de Columbia, el norte de Virginia y el centro de Maryland.

“Fue un caos absoluto”, dijo Natasha Enos, quien pasó la noche del sábado y el domingo por la mañana sin dormir en el Aeropuerto Internacional de Denver, durante lo que se suponía que sería una breve escala de Washington a San Francisco.