SANTIAGO.- Los chilenos prefirieron a los independientes en las elecciones del fin de semana, que evidenciaron un voto de castigo a los partidos tradicionales, especialmente a la oposición de centroizquierda que compitió fragmentada, mientras el oficialismo de derecha obtuvo su peor resultado en décadas.
Los electores dieron vida a una convención de 155 miembros que escribirán una nueva Constitución para reemplazar a la impuesta por la dictadura militar (1973-1990). Ninguna fuerza tiene los 2/3 necesarios de los escaños para plasmar cambios profundos, pero tampoco un tercio para bloquearlos.
Las mujeres ocuparán 77 escaños de la convención y los hombres 78, debido a una corrección de género para asegurar la paridad, lo que implica un gran salto en la participación política femenina, que en el Congreso sólo ocupan el 23% de los escaños.
Entre los más perjudicados están los partidos de la oposición de centroizquierda, que compitió fragmentada en varias listas, y entre los más favorecidos estuvieron el bloque formado por el Partido Comunista y el izquierdista Frente Amplio, que se impuso a la centroizquierda y una multiplicidad de listas de independientes, según informó el Servicio Electoral (SERVEL).